martes, 20 de junio de 2017

¿Responsable o no?. Catòlicos y Protestantes



¿Recuerda la imagen famosa  de ese niño Palestino que  se pone 
sin temor  frente a  un tanque israelì, listo para lanzarle una
 piedra?
Esta imagen es parecida, lo que sucede es que ese niño palestino 
no sabìa, que antes de salir a matar niños con piedras en la 
mano, los tanques son "bendecidos " por los sacerdotes como 
ese que està allì, tambien al frente de un tanque, 

¿Que la Iglesia Catòlica no es responsable de.... sino  las 

personas catòlicas?

Y entonces Fulanito, ¿què es la "Santa Iglesia Catòlica" 

sino una Instituciòn compuesta por personas?. 
No es lo mismo, una persona que vaya los Domingos 
a la Iglesia, (que sea un catòlico que va a la iglesia, y 
se confiesa etc.), y un dìa cualquiera cometa un homicidio, 
o una violaciòn, en ese caso, es una persona que se 
ha "desviado" y la Iglesia serìa mìnimamente responsable.

 Pero cuando esa persona tiene un cargo, sea Sacerdote, Obispo, Arzobispo, Diàcono, Presbìteros, Cardenal, 
Papa, etc.. 
Esa persona estarìa representando a la "Santa Iglesia Catòlica", y la "Santa Iglesia Catòlica" serìa 
totalmente responsable, junto, lògicamente con 
los responsables directos.

En el comentario, acerca de Ruanda le citè de fuentes gubernamentales , le sugerì que leyese un poco de 
historia, por lo visto, no es su fuerte.

La "Santa Iglesia Catòlica" aprobò, ordenò y asesinò a 
miles de miles de personas que solo querìan entender 
las Escrituras, allì, en la època de la Inquisiciòn, 
¿o va a poner en duda usted la historia?. 
¿O tambien va a poner en duda la historia de Ruanda? 
¿O la de la "Santa Inquisiciòn? 
Porque si es asì, (como dice usted), entonces el Papa no 
dijo lo que dijo con respecto a Ruanda. 
Porque si es asì, (como dice usted), el Papa no habrìa pedido perdòn, por todas las atrocidades que SU 
"Santa Iglesia Catòlica" cometiò en la "Santa 
Inquisiciòn", 
para usted entonces.... Todos son mentirosos, 
todos mienten, incluso el Papa, el Sumo Pontìfice, 
Vicario de Cristo, Pontìfice Maximus. Ya que 
"le gusta tanto la historia", le dejarè acà, algo que le 
puede interesar. 
Segùn el diccionario eclesiàstico de Ferrariz,
 (y no hablo del automòvil), dice del Papa: ……

””El Papa es de tal dignidad y alteza….que no es sencillamente un hombre…. si no como si fuera Dios, 
y el Vicario de Dios……… Por lo tanto el Papa està coronado con una corona triple… como rey del cielo…
de la tierra y del infierno…….. No…la excelencia y el 
poder del Papa, no son solo en cuanto a cosas 
celestiales, terrestres e infernales.. sino que tambien 
està sobre los àngeles, y es superior a ellos…….. 
De modo que si fuera posible que los àngeles erraran de 
la fe, o tuvieran sentimientos contrarios a ella….
podrìan ser juzgados y excomulgados por el Papa... 
Èl es de tan grande dignidad y poder, que ocupa idénticamente el mismo tribunal de Cristo……………. 
De modo que sea lo que sea que el Papa haga, 
parece proceder de la boca de Dios………….. 
El Papa es, como si fuera Dios en la tierra…..
el ùnico prìncipe de los fieles de Cristo…….
el mayor rey de todos los reyes”” 

¿No le parece a usted que eso es una tamaña soberbia?. 
El Papa pudiendo excomulgar a àngeles...
¡WUAUU! 
Y el Papa ocupa el mismo tribunal de Cristo 
¡WUAUU!
 El Papa es como si estuviese Dios acà en la tierra. 
Y triple ¡WUAUU!. 
Sugerencia para usted Fulanito, con sinceridad se lo digo......... 
Estudie la Biblia, que es bueno para el alma....pero 
tambien un poquito de historia, que es bueno para la 
mente. 
Es tan bueno, Fulanito, salir de Babilonia la Grande, 
y Babilonia la Grande no es solo la "Santa Iglesia 
Catòlica", (como dicen algunos), ella es solo parte 
de Babilonia la Grande. 
La Gran Ramera, como le llama 
la Biblia, es el conjunto de religiones del mundo, las 
cuales no enseñan la verdad de la Biblia a las personas, 
las que no enseñan a las personas a adquirir conocimiento exacto de Dios, el ùnico Dios verdadero y de Jesucristo, a quien Èl enviò Cuando se cae la venda que cubre los ojos del corazòn, es entonces cuando uno se libera.

Cuando conocemos la verdad, es entonces, cuando se es libre 

La Iglesia Catòlica y su hermana las Iglesias Protestantes, (cristianos evangèlicos protestantes),  y la participaciòn de ambas en las guerras.

El 1ª de Septiembre de 1939
Alemania invadía Polonia, con lo que daba comienzo la II Guerra Mundial. 
Tres semanas después aparecía el siguiente titular en The New York Times: “Las iglesias alientan a los soldados alemanes”. 

¿Apoyaron realmente las iglesias alemanas las guerras de Hitler? 
Friedrich Heer, católico romano y profesor de Historia en la Universidad de Viena, reconoció que sí lo hicieron: “En la cruda realidad de la historia alemana, la cruz y la esvástica se fueron acercando cada vez más, hasta que la esvástica proclamó el mensaje de la victoria desde las torres de las catedrales alemanas, las banderas con la esvástica aparecieron en los altares, y los teólogos, pastores, clérigos y políticos católicos y protestantes aclamaron la alianza con Hitler”. 

En efecto, las autoridades eclesiásticas dieron apoyo incondicional al movimiento bélico de Hitler, como escribió el profesor católico romano Gordon Zahn: “Cualquier católico alemán que acudiera a sus superiores religiosos en busca de guía espiritual y dirección respecto a prestar servicio en las guerras de Hitler, recibía prácticamente las mismas respuestas que hubiera recibido del propio dirigente nazi”. 

Las religiones del bando contrario. 

Ahora bien, ¿qué decían las iglesias de los países que luchaban contra Alemania?. 
The New York Times del 29 de diciembre de 1966 dijo: 
“En el pasado, las jerarquías católicas locales casi siempre apoyaron las guerras de sus naciones, bendiciendo a las tropas y rezando por la victoria, mientras que un grupo de obispos del bando opuesto rezaban públicamente por el resultado contrario”. 

¿Aprobó el Vaticano este apoyo a los ejércitos contrarios?.

 Veamos: 
El 8 de diciembre de 1939, tan solo tres meses después de haberse declarado la II Guerra Mundial, el papa Pío XII redactó la carta pastoral Asperis Commoti Anxietatibus, dirigida a los capellanes de los ejércitos de las naciones beligerantes. 
En ella se instaba a los capellanes de ambos bandos a confiar en sus respectivos obispos militares, y se les exhortaba, “como soldados bajo la bandera de su país, a luchar también por la Iglesia”. 

La religión suele tomar la delantera con entusiasmo en movilizar a los países para la guerra. 
“Hasta en nuestras iglesias hemos puesto el estandarte de la guerra”, admitió el difunto clérigo protestante Harry Emerson Fosdick. 
Y con respecto a la I Guerra Mundial, el general de brigada británico Frank P. Crozier dijo: “Las iglesias cristianas son las mejores creadoras de actitudes sanguinarias que tenemos, y nos hemos servido bien de ellas”. 

No obstante, eso ocurrió en el pasado. ¿Qué puede decirse del papel que desempeña ahora la religión en la guerra de las repúblicas de la anterior Yugoslavia, donde la mayoría de la gente es o católica romana u ortodoxa?. 

La responsabilidad de la religión.

Un titular aparecido en la revista Asiaweek del 20 de octubre de 1993 rezaba así: “Bosnia es un epicentro de conflictos religiosos”. 
En el periódico San Antonio Express-News del 13 de junio de 1993, se publicó un artículo titulado “Los caudillos religiosos deberían poner fin a las calamidades bosnias”. 

Decía: “Las religiones católica romana, ortodoxa oriental y musulmana [...] no pueden eludir su responsabilidad por lo que está sucediendo. 
Esta vez no, no con el mundo entero viendo todas las noches [las noticias]. 
Es su guerra. [...] Es obvio que los jefes religiosos comparten la responsabilidad de la guerra. 
Su misma santurronería la provoca. 
Lo hacen cuando bendicen a un bando para que venza al otro”. 

¿A qué se debe, por ejemplo, que se odien tanto los miembros de la Iglesia Católica Romana y de las Iglesias Ortodoxas Orientales?.

 La culpa la tienen los papas, los patriarcas y demás dirigentes eclesiásticos. 
Desde que estas religiones se separaron por completo, en 1054, las autoridades eclesiásticas han fomentado el odio y las guerras entre sus fieles. 

El 20 de septiembre de 1991, el periódico montenegrino Pobeda señaló a ese cisma religioso y sus consecuencias en un artículo sobre las luchas recientes. 
Bajo el titular “Asesinos en el nombre de Dios”, explicó: “No es una cuestión de política entre [el presidente croata] Tudjman y el [líder serbio] Milosevic, sino, más bien, una guerra religiosa. 

Debe decirse que ya han pasado mil años desde que el Papa decidió eliminar la competencia de la religión ortodoxa.

 [...] En 1054 [...] el Papa declaró culpable de la separación a la Iglesia Ortodoxa. [...]. 

En 1900 el primer congreso católico explicó con claridad el proyecto de genocidio de los ortodoxos para el siglo XX.

 [Dicho] proyecto está en plena ejecución en la actualidad.” 

Sin embargo, este reciente enfrentamiento no es el primer caso de conflicto religioso en nuestro siglo. 

Hace cincuenta años, durante la II Guerra Mundial, los católicos romanos trataron de hacer desaparecer la presencia de la Iglesia Ortodoxa en la zona. 
Con el respaldo del Papa, el movimiento nacionalista croata denominado Ustacha llegó a gobernar el estado independiente de Croacia. 

The New Encyclopædia Britannica dice que esta gobernación aprobada por el Vaticano empleó “prácticas sumamente brutales, incluidas las ejecuciones de centenares de miles de serbios y judíos”. 

En el libro The Yugoslav Auschwitz and the Vatican (El Auschwitz yugoslavo y el Vaticano), no solo aparecen documentados estos asesinatos en masa en los que murieron decenas de miles de víctimas, sino también la implicación del Vaticano en ellos. 

Por otro lado, la Iglesia Ortodoxa ha respaldado a los serbios en su lucha. 
A cierto dirigente de una unidad militar serbia se le atribuyen estas palabras: ‘El Patriarca es mi comandante’. ¿Qué se podría haber hecho para detener toda esta matanza, que tan solo en Bosnia-Herzegovina ha resultado en la muerte o desaparición de 150.000 personas?. 

Fred Schmidt declaró en el San Antonio Express-News que el Consejo de Seguridad de la ONU debería aprobar “una resolución formal que exhortara al Papa, 
al patriarca de Constantinopla y [a los demás líderes] de las religiones católica, 
ortodoxa oriental y musulmana con jurisdicción en Bosnia-Herzegovina, a dar por terminada inmediatamente la lucha, 
y a reunirse para determinar cómo conseguir que sus fieles consideren a los miembros de las otras religiones como su prójimo”. 

Siguiendo esa misma línea, un comentario publicado en el periódico Progress Tribune, de Scottsdale (Arizona, E.U.A.), llegó a la conclusión de que la guerra “podría detenerse si los líderes religiosos se lo propusieran seriamente”. 

El artículo sugería que lo hicieran “excomulgando de inmediato a cualquier feligrés que lanzara una granada en Sarajevo”. 

No promueven realmente la paz. 

Sin embargo, los papas siempre se han negado a excomulgar a los peores criminales de guerra, aun cuando otros católicos han suplicado que se tome tal acción. 

Por ejemplo, la publicación Catholic Telegraph-Register, de Cincinnati (Ohio, E.U.A.), bajo el titular “Fue criado católico pero viola la fe, dice un cable dirigido al Papa”, comentaba: “Se ha hecho un llamamiento a Pío XII para que excomulgue al Reichsführer Adolph Hitler. [...] ‘Adolph Hitler —decía en parte [el cable]— nació de padres católicos, recibió el bautismo y fue criado y educado como tal’”. 

Sin embargo, Hitler jamás fue excomulgado. 

Examinemos también la situación que existe en los lugares de África donde se han librado guerras atroces. 

Quince obispos católicos romanos de Burundi, Ruanda, Tanzania, Uganda y Zaire confesaron que, a pesar de la presencia de muchos “cristianos” bautizados en la región, los “conflictos internos han resultado en masacres, destrucción y traslados forzosos de personas”. 

Los obispos admitieron que la raíz del problema “es que la fe cristiana no ha penetrado lo suficiente en la mentalidad del pueblo”. 

El periódico National Catholic Reporter del 8 de abril de 1994 decía que el “Papa [...] sentía un ‘inmenso dolor’ por las recientes noticias del conflicto existente en la pequeña nación africana [de Burundi], cuya población es predominantemente católica”. 

El Papa dijo que, en Ruanda, donde alrededor del 70% de la población profesa esta religión, “hasta los católicos son responsables” de la matanza. 

Sí, católicos de ambos bandos se han matado despiadadamente, tal como hicieron en incontables guerras anteriores. 

Y, como hemos podido comprobar, otras religiones han hecho lo mismo. 

Nota: 
Hitler, jamás fue excomulgado por la Iglesia Católica.

No hay comentarios:

Publicar un comentario